Luego de que lo despidieran de su trabajo, Pablo Jiménez encontró en las salsas picantes sus aliadas para crear una empresa, con sabores tan diferentes como El Pisuicas o XXX.
Ahora ese pequeño negocio llamado Mono Loco, exporta fuera del país, vende sus productos en 50 locales nacionales, además cuenta con un establecimiento en San Pedro.
Raquel Rodríguez rrodriguez@larepublica.net | Jueves 14 julio, 2016
La idea nació hace cinco años cuando Jiménez empezó a repartir entre sus amigos una salsa creada por él mismo. La misma fue tan bien aceptada que ahora comercializa cuatro tipos diferentes y hasta un aceite para ensaladas.
“En ese momento nos dimos a la tarea de patentar los productos, ponerles etiquetas, marca y estandarizar las recetas”, dijo Jiménez, uno de los socios.
XXX, Viejo Verde, El Pisuicas, Vieja e’ Patio y Pierdealmas son los nombres de los productos vendidos por esta pyme. Cafeterías, restaurantes y mercados son otros locales donde se pueden adquirir las salsas o el kit con cinco productos. Los precios rondan entre ¢2.500 y ¢3.500 por cada salsa, el kit de todas ronda los ¢8.500.
En la tienda en línea se pueden comprar los productos que son repartidos por medio de Correos de Costa Rica.
“Si el cliente va a nuestro local en bicicleta le damos un 10% de descuento en su compra”, agregó Jiménez.
Utilizar las redes sociales y su página web ha sido una estrategia que los ha dado a conocer.
“Buscamos que sea un sitio divertido e interactivo, las salsas son un complemento picante a las comidas, eso queremos transmitir a nuestros clientes”, dijo Paola Conejo, chef de la empresa.
Los productos son de proveedores de Orotina, Los Santos, Grecia, San Cristóbal Norte y Orosi, entre otras partes del país.
Ahora la empresa se encuentra en capacitaciones para vender a gran escala por medio del curso de Exportadores de Procomer, meta que espera alcanzar el próximo año.
Artículo original de La República